Podemos decir que el espacio terrenal más cercano al paraíso es indudablemente la costa. Un espacio hecho lugar por la conjunción de los cuatro elementos. El agua, la tierra, el cielo y las estrellas. Representados por el mar, el viento, el horizonte, el sol y la luna respectivamente.

En su más bella combinación, todos, conforman lo que podemos llamar la genealogía de la arquitectura de la costa.